Descubren un perfume milenario a base de aceites esenciales

En la localidad sevillana de Carmona hace mucho tiempo que se puede visitar una necrópolis romana del siglo I, descubierta a finales del XIX.

El conjunto arqueológico también incluye un anfiteatro. 

Así que cuando se realizan obras o excavaciones en la zona, se debe ir con cuidado por si te encuentras con alguna ¡sorpresa milenaria! 


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Un perfume milenario a base de aceites esenciales

Esto es precisamente lo que le ocurrió a un vecino cuando construía una piscina en agosto de 2019.

Enseguida dio aviso y los especialistas se dieron cuenta de que se trataba de un mausoleo con 8 nichos en muy buenas condiciones. Los dataron de alrededor del s. I.

En las urnas funerarias encontraron platos de vidrio y cerámica de gran valor. Pero uno de los hallazgos que más les sorprendió fue un frasco de cristal de roca (cuarzo) perfectamente sellado. 

Este tipo de frascos de cuarzo tallado se consideran objetos de lujo y eran muy poco frecuentes en la época romana. Además, cuando descubrieron que contenía un poso sólido, se dieron cuenta de que se trataba de un unguentarium, es decir, un recipiente para guardar perfume.

Así pues, las cenizas de la urna en la que encontraron el frasco debían pertenecer a una mujer de clase acomodada de Carmo (actual Carmona), situada en aquella época en la ruta comercial entre Córdoba (Corduba) y Sevilla (Hispalis).

El hallazgo de este unguentarium era pués, muy importante ya que daba la oportunidad de estudiar la composición de las sustancias que contenía, probablemente un perfume, conservado durante ¡2000 años! 

Inicio de las investigaciones

A partir de aquí, un equipo de especialistas en química orgánica de la Universidad de Córdoba (UCO) liderado por José Rafael Ruiz Arrebola, inician un minucioso análisis del contenido de este frasco.

En primer lugar, determinan que el material del tapón es carbonato de magnesio y calcio (dolomita). Hecho fundamental para el mantenimiento estanco del frasco, ya que si en vez de una piedra hubiera sido corcho o madera, probablemente se hubiera evaporado.

Además, este tapón viene sellado con betún (bitumen), otro factor clave para la buena conservación del contenido de recipiente. El betún es una mezcla de sustacias orgánicas muy densa y viscosa que puede lograr una buena conservación de plantas y animales, siendo además, un excelente absorbente de compuestos orgánicos. 

A continuación, se centran en el contenido del unguentarium. 

El análisis mediante cromatografía de gases asociada a espectometría de masas permitió la identificación de tres grupos de componentes: hidrocarburos asociados con el bitumen, sesquiterpenos asociados a la presencia de un perfume o esencia, y finalmente un tercer grupo que correspondería a un lípido de origen vegetal.

Esto corroboraría lo que los investigadores ya habían encontrado publicado en los escritos de Plinio el Viejo, quien explicaba que los perfumes romanos estaban formados de una base y un aceite esencial obtenido de plantas.

Según los investigadores, esta base podía ser aceite de oliva, que servía de fijador y conservante del perfume.

Respecto al perfume, los principales componentes aromáticos identificados fueron: pachulenol, beta y alfa-pachuleno, alfa-copaeno-8-ol, alloaromadendreno, cariofileno y alfa-cubeneno.

Esta composición parecía indicar que se trataba de aceite esencial de pachuli. Pero el pachuli no era de uso habitual en esa época, sinó más bien el nardo, cuyo aceite esencial también contiene sesquiterpenos. 

Así que para salir de dudas, compararon la composición del perfume del unguentarium con perfiles cromatográficos actuales de aceites esenciales de pachuli y de nardo.

Unos resultados sorprendentes

Efectivamente, se trataba de ¡aceite esencial de pachuli! Este descubrimiento pone en evidencia que la familia enterrada en este mausoleo era adinerada, ya que el pachuli es una planta que no se cultivaba en la zona, sinó que procedía de Oriente.

Así mismo, el frasco de cuarzo, un material súper duro, tan finamente tallado, tuvo que ser elaborado lejos de la Bética, quizás en Roma o en Pompeya, según Ruiz Arrebola, donde se asentaban grandes perfumistas.

En cualquier caso, con toda esta investigación en el campo de la arqueométrica, se ha podido determinar que en zonas tan alejadas de Oriente como el sur de la Península Ibérica, se usaban perfumes a base de plantas aromáticas como el pachuli.

I que realmente se trataba de un producto de mucho valor y muy apreciado por la difunta, ya que los familiares lo eligieron para formar parte del ajuar para su viaje a la otra vida, según Macarena Bustamante-Álvarez, investigadora de la Universidad de Granada.

El 23 de mayo de 2023 se publicó en la revista Heritage todo este trabajo de investigación y sus fascinantes resultados.

En el siguiente enlace podéis leer el artículo completo (en inglés):

Archaeometric identification of a perfume from Roman times

Pachuli_Pogostemon_cablin

Esto es todo por hoy. ¡Cuidaros mucho!

Laura Mestres
Licenciada en Farmacia, Responsable de Formación en AromaTraining


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